El Título es muy significativo, al final, se trata de relaciones. Y en el caso de un taller o cualquier empresa, se tiene relaciones principalmente con los empleados y con los clientes.

Ellos, los clientes, ¿acuden al taller ASSISTEC (es un supuesto)?, ¿o vienen a ver a Manel?, (el dueño del taller).

Yo creo que vienen a ver a Manel. Los clientes desean hablar con Manel, incluso para pedir una cita, salvo en grandes concesiones o estructuras grandes o muy grandes.

Si esta circunstancia del taller multimarca afecta a la calidad de vida del propietario del taller y colateralmente a la rentabilidad del negocio, cómo afrontar esta situación, sin que afecte a la relación con los clientes será un factor para analizar. Porque es evidente que esto no ayuda.

En este articulo pondré encima de la mesa dos opciones y dependerá de las características del taller y de sopesar donde se va a sentir más cómodo el propietario del taller, si como mecánico o como gestor.

Si en taller tenemos la figura del Asesor/Recepcionista/Oficinista y/o Administrativos,  mi recomendación, es formar, en caso de necesidad, en técnicas de venta a esta figura, dado que este perfil su función principal es comercial, asesorando al cliente, gestión y planificación de citas y recepción activa. ¿Es necesario conocimientos técnicos?, pues si los tiene bienvenidos, pero no es imprescindible, al menos bajo mi criterio. Evidentemente formarlo en gestión de taller, conocer que KPIS debe analizar para informar a la Propiedad del Taller.

Si se opta por esta vía al contar con los recursos humanos, tocará trabajar en la educación al cliente (querrán ir a ver al dueño) y en formar a esta figura, darle todo el poder relacionado a este perfil, con el objetivo de que el propietario se pueda dedicar a lo suyo, es decir, a rentabilizar sus horas productivas. 

¿Efectos? Mejora de la rentabilidad y calidad de vida laboral.

La otra opción que pongo en la mesa es un cambio de rol, pasar de mecánico a gestor.

Es un valor añadido en este caso sus conocimientos técnicos, pero sobre todo será necesaria una dosis muy alta de actitud ante el cambio y a probar cosas diferentes.

No es saludable que en las 8 horas laborables sólo consiga facturar 2 y tener que seguir reparando una vez todo el mundo está en sus casas.

Entonces, ¿qué se hace con las horas productivas del propietario del taller? Alguien las tendrá que producir, y aquí aflora otro problema, encontrar a un técnico. 

¿Efectos? Mejorar rentabilidad y calidad de vida laboral. Vaya, los mismos que en la opción 1. 

Ver y no visionar no ayuda a la gestión. Si sólo nos fijamos en hoy y no planificamos a más largo plazo llevar a cabo cambios se hace dificultoso y la eficacia no estará siempre asegurada. Por tanto, si os veis reflejados en este escenario, invito desde estas líneas a visionar y no tan solo a ver y que el cerebro piense en “como lo hago” y no se detenga con la excusa de “no puedo”